Homenaje al hijo
Infinitas
noches sembraron una pasionaria
en los
flancos de mis montañas.
óvulo de una flor desconocida
germinación del grito fecundo
pájaro nocturno y desvelado
Y aunque el frío del miedo recorriera la
tierra,
regaré tu
nombre,
tu nombre de
hijo nacido por rito sagrado
Tras la vana
apariencia humana se yergue el sueño divino
entre todas
mis contradicciones
te seguiré amando en las
semillas,
en la tierra y en el agua,
germinado en mi vientre,
florcita de verano.
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